Habititualmente se usa esta expresión para decir que los políticos no pasan del "Y tú más". Pero en el fondo va mucho más allá. España en general funciona como un gran patio de colegio.
Los políticos no salen del "y tú más". Pero los ciudadanos no somos mejores. A todo lo que aspiramos es a ser los amigos del delegado de clase, para que no nos apunte en la pizarra como a los demás. Somos pequeños y los grandes nos pegan en el patio. Y nuestra aspiración no es ser grandes para cambiar las cosas, sino ser grandes para pegar al que viene detrás. Cuando el empollón saca buenas notas, no intentamos que se nos pegue un poco de lo bueno, intentamos que nos haga los deberes bajo una amenaza, o le pegamos una paliza en el patio. El egoismo del niño pequeño que ha roto su juguete y no quiere esforzarse por tener un juguete nuevo, sino que se esfuerza por romper el juguete al niño de al lado y así ambos estén rotos.
No queremos que se cumplan las leyes, queremos inclumpliras sin qe nos pillen, pero que a ese que han pillado le caiga todo el peso de la ley, buscamos influencias que nos permitan librarnos de las normas que no nos gustan y pasárnoslas por el arco del triunfo. Nuestra aspiración no es dejar de ser explotados, sino en convertirnos en explotadores. Y cuando en nuestro entorno hay un águila, o un lince, lo que buscamos es que le aten las alas o le corten las patas, no sea que corra más que nosotros. Si a alguien le va mejor que a nosotros, no vamos a ver por qué ocurre esto, en qué podemos copiarle para mejorar, lo ideal es conseguir que esté igual de jodidos que nosotros, o mejor si termina más jodido que nosotros.
El país entero está aborregado, falto de valores y educación. Todo se plantea como un partido de fútbol, donde no hay grises. Blanco o negro. Ganas o pierdes. Y no se disfruta de la victoria, sino de machacar y humillar al perdedor. Da igual que sea política o dos personas compitiendo por un ascenso en la empresa. La actitud no es colaborar, no es el juego limpio y que gane el mejor y después de esto a ver qué podemos hacer entre ambos para mejorar. La actitud es trepar, pisar, hacer falta sin que nos vean, y una vez arriba, joder al otro.